Los secretos del River Plate de Martín Demichelis: cuáles son los “cambios invisibles” en la alimentación y el cuidado del plantel
River Plate atraviesa un presente inmejorable al imponerse en 14 de sus últimas 16 presentaciones, lo que le permitió avanzar de ronda en la Copa Argentina, estar en carrera en la fase de grupos de la Copa Libertadores y liderar con seis puntos de ventaja la Liga Profesional.
Además de elevar el nivel de jugadores que eran castigados por el público y verse pragmático y hábil a la hora de modificar los esquemas según el rival, este cuerpo técnico realizó algunos “cambios invisibles” que van de la mano de los buenos resultados. El actual cuerpo técnico encabezado por Martín Demichelis busca inculcar nuevos hábitos alimenticios y cuidados dentro del plantel.
El primer mito que logró desterrar Infobae es que no es cierto que en el Millonario estén prohibidas las harinas. “Sería como no ponerle combustible a un auto de carreras”, le explicaron a este sitio. Desde el club remarcan que no se limitó ni quitó ningún hidrato de carbono compuesto ya que representa una de las fuentes principales de alimento para este tipo de deportes. Lo que sí se hizo fue una segmentación para los que son intolerantes al gluten. Aparecen dentro de las opciones fideos con o sin gluten.
Según los estudios consultados por la institución, el futbolista argentino, al ser un país muy carnívoro, tiene un exceso de ingesta de proteínas y un déficit, en muchos casos, de hidratos de carbono. Dentro del menú de los deportistas aparecen distintas opciones de proteínas de animales, como carnes rojas, pescado o pollo. No figura como disponible todos los días, pero sí se ponderó la proteína animal por sobre la vegetal, ya que es de más rápida absorción.
Por supuesto que cada cuerpo y metabolismo es diferente. Ante este escenario la institución de Núñez se rige por la conocida ley de Escudero, la cual habla de cantidad, calidad, distribución y adecuación. Justamente sobre este punto aparece lo anteriormente mencionado de la variante con y sin gluten en las pastas.
Cada uno de los integrantes del plantel posee una cantidad determinada de ingesta, dependiendo de su necesidad. La intención no es que se encuentren a dieta, sino que estén alimentados de la manera correcta y que posean la cantidad de kilocalorías diarias para cada composición corporal y para cada demanda individual.
Por supuesto que dentro de este menú deportivo sí están vetados los fritos, embutidos y las bebidas gaseosas, cosas que no son beneficiosas para futbolistas de alto rendimiento. En contrapartida, en las variables para armar sus platos aparecen todo tipo de arroces, de pescado (blancos o azules), carnes magras, fideos, verduras y frutas. También leche deslactosada, de almendra o de soja. La idea es que cada uno pueda hacer la adecuación y pueda cumplir con sus necesidades.
En el rubro bebidas figuran habilitadas las aguas y jugos, como limonadas, pomeladas o naranjadas (agua con jugo exprimido). La intención es que tomen cosas naturales y que no poseen colorantes. En lo que respecta a las bebidas isotónicas, normalmente, son para los entrenamientos.
Los famosos GPS que se utilizan tanto en las prácticas como en los partidos también aportan su granito de arena en esta ecuación. Estos dispositivos marcan la “carga mecánica”, lo que permite saber las cantidades de kilómetros realizados, las velocidades y la oxigenación, por ejemplo. Estos parámetros sirven para analizar la carga de trabajo e ir cambiándola en base a datos. Por ejemplo, en los entrenamientos denominados clásicos se apuesta por una ingesta más proteica. A los futbolistas, para ayudarlos a que armen sus platos de la forma más adecuada posible, se les brindaron distintas charlas informativas.
¿Y los dulces? Por ejemplo, para los desayunos pueden inclinarse por tostadas de pan blanco o negro (con y sin gluten) que pueden ser acompañadas por mermeladas orgánicas. Luego de las comidas, en cambio, pueden comer ensaladas de frutas, las cuales los días de entrenamiento o concentración aparecen cortadas para que puedan armarlas a su gusto. En algunas ocasiones también se incluyó el clásico queso y dulce.
A la hora de evaluar la evolución de cada integrante del plantel en River Plate buscan la precisión mediante el análisis de los pliegues cutáneos y subcutáneos. Esto permite ver el peso corporal y cómo se fue modificando el valor (ya sea para arriba o para abajo). En época estival (por ejemplo durante la pasada pretemporada) se complementó con estudios de densidad urinaria para evaluar la cantidad de líquido que se toma y controlar que no haya una pérdida mayor a la ingesta.
Vale destacar que la medición de los pliegues depende de la necesidad de cada jugador. Puede ser cada semana como cada tres días ó 15. Todo depende del objetivo marcado para cada individuo.
Los trabajos preventivos también son una constante dentro del esquema diario en River Plate. El cuerpo técnico y médico evaluaron el historial de lesiones de cada futbolista y realizaron un análisis grupal e individual para que el margen de prevención esté alto y los factores de riesgo sean cada vez menores.
En una parte trabajan aspectos generales vinculados al fútbol, como movilidad de cadera o rodilla. En otros es sectorizado según la necesidad de cada uno. Por ejemplo, si un integrante tuvo varias lesiones musculares en el isquiotibial, se hace foco en esa zona del cuerpo.
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