Los gremios marcharon en Rosario rechazando el DNU del Gobierno
Distintos gremios convocaron este jueves a una marcha al Monumento a la Bandera de Rosario, en protesta contra el mega decreto anunciado en la noche del miércoles por Javier Milei.
El Movimiento Sindical de Rosario llamó a reunirse en la plaza 25 de Mayo, desde donde partieron miles de manifestantes hacia el emblemático sitio de la ciudad, donde se escucharon cantos contra el Presidente.
El secretario general del Sindicato de Empleados Municipales, Antonio Ratner, apuntó que la convocatoria es “en disconformidad con esta medida que avasalla las instituciones, a la Constitución y al Congreso, y que se arroga facultades de otros poderes del Estado”.
Entre quienes marcharon, dijeron presente Municipales, Dragado y Balizamiento, Luz y Fuerza, Bancarios, Judiciales, Prensa, Recolectores, Camioneros, Estatales, Marítimos (Siconara), Sanidad, Salud (Siprus), Apur (no docentes UNR), Cadetes de Rosario, Coad, Amsafé, entre otros, además de partidos de izquierda y el Movimiento de Inquilinos.
Los representantes de los trabajadores se refirieron a la medida del Gobierno como “un atropello institucional”. Ratner afirmó que el decreto afecta sobre todo “a los que alquilan, los empleados, en las reformas laborales a los trabajadores, en las reformas previsionales a los jubilados”, además de que “le vuelve a poner impuestos al trabajo”.
Edgardo Arrieta, secretario general del Sindicato de Dragado y Balizamiento, por su parte aseguró que estuvo todo el día en contacto con dirigentes de la CGT y los instó a llamar a movilizarse en todo el país.
“La forma y el fondo del DNU que los argentinos conocimos es en sí mismo una muestra total de antidemocracia, de autoritarismo, y de acciones anticonstitucionales con las que se quiere borrar las históricas luchas y conquistas del pueblo argentino y de sus movimientos populares”, afirmaron desde el Sindicato de Prensa Rosario.
El titular de Amsafé Rosario, Juan Pablo Casiello, consideró que el DNU presidencial es “una ofensiva total, una declaración de guerra contra los trabajadores”, e instó a llamar a “un gran paro nacional”.
Lorena Almirón, secretaria de ATE Rosario, también expresó ante los medios de comunicación la preocupación de su gremio ante los posibles despidos que podrían derivarse de la privatización de las empresas públicas.
Desde el lado de los movimientos de izquierda, el vocero de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Eduardo Delmonte, le dijo a El Tres que el Gobierno ha “empujado a muchos sectores de la población al hambre y a la pobreza, incluso a gente que no lo pensaba que le iba a suceder”. “El pueblo argentino parece manso pero no lo es y va a demostrarlo en la calle”, advirtió.
La protesta transcurrió sin incidentes y con poca presencia policial, a diferencia de la marcha de la izquierda y los movimientos sociales que se vivió ayer en la Ciudad de Buenos Aires, con el estreno del protocolo antipiquetes de Patricia Bullrich.
En la ciudad de Santa Fe también hubo una convocatoria de distintos sectores que derivó en un cacerolazo de unas 500 personas en Bulevar Gálvez y Pedro Vittori.
Los manifestantes se acercaron con banderas argentinas, cacerolas y pancartas, y cantaron consignas como “la patria no se vende”, mientras cortaban el tránsito.