Operación central para el Real Madrid: los tres candidatos que cumplen los parámetros del club
El Santiago Bernabéu se quedó en silencio cumplida la media hora del partido contra el Villarreal. Un mutismo que recorrió el feudo blanco de fondo a fondo como un sentido escalofrío. David Alaba presionó a Gerard Moreno cuando su pie izquierdo se quedó clavado en el césped al mismo tiempo que la parte superior de su pierna giró en dirección contraria. Cayó al suelo, sin bramar ningún grito ni realizar aspavientos ostensibles de dolor, pero con una seriedad en su rostro que reflejaba la gravedad de la situación. Luka Modric fue el primero en llegar y percatarse de ello.
Llamó a los médicos y se llevó las manos a la cabeza, un gesto que repitieron en cadena los que fueron acercándose y vieron las señales del austriaco, que abandonó el terreno de juego sin apoyar la pierna izquierda y siendo ayudado por dos integrantes del cuerpo médico. El Madrid se sobrepuso al contratiempo y acabó consiguiendo una victoria que le restituyó en la cima de LaLiga, pero con el pitido final, los peores presagios se hicieron realidad a través de un comunicado del club blanco. “Tras las pruebas realizadas a nuestro jugador David Alaba se le ha diagnosticado una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. El jugador será intervenido quirúrgicamente en los próximos días”.
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La baja de larga duración de Alaba, unida a la recuperación de Militao, que evoluciona mejor de lo esperado de su rotura de ligamento cruzado deja a Ancelotti con Nacho y Rüdiger como únicos centrales disponibles hasta el tramo final del curso, cuando se espera la vuelta del brasileño. La situación se volvió más dramática tras conocerse la sanción de un partido a Nacho tras su expulsión frente el Alavés, por lo que Rüdiger será el único central para el primer partido del 2024 ante el Mallorca y su acompañante en la zaga será Tchouaméni, quien verá retrasada su posición.
Gonçalo Inacio
El panorama obliga al Real Madrid, reticente, a mirar el mercado de fichajes al menos de reojo. Gonçalo Inácio, jugador del Sporting de Portugal, es uno de los nombres que lleva meses en el radar blanco. A sus 22 años, afronta su cuarta temporada como pieza angular de la zaga lisboeta. Zurdo, como Alaba, aunque capaz de jugar también en el lado derecho, destaca por su salida de balón, desplazamiento en largo y gol. Hasta 14 en cuatro campañas. Su salida se antoja complicada a mitad de temporada ya que el Sporting le renovó el pasado verano aumentando su cláusula de rescisión hasta los 60 millones de euros. No obstante, encaja dentro de la política del Madrid de incorporar jugadores jóvenes adelantándose al inflacionismo que provocan las pujas con los clubes estado.
Robert Renan
Dos años más joven es Robert Renan, central brasileño del Zenit que también cumple los requisitos del conjunto blanco: joven, zurdo y asequible, ya que la cesión con opción de compra en verano seduce a los dos clubes. Renan se encuentra dentro del espectro de talentos brasileños que Juni Calafat viene siguiendo. Maduro para su edad (20), posee una innata jerarquía en su juego y buen juego aéreo y trato con el balón, cada vez más importantes. Además, puede solventar problemas en el lateral izquierdo, aunque su rol sería más defensivo y no de apoyar tanto en el ataque.
Giorgio Scalvini
Giorgio Scalvini es otro de los nombres propios. Cuenta con la bendición de Ancelotti y un liderazgo sorprendente a sus 20 años. Sus 75 partidos con la Atalanta y siete con la selección italiana absoluta han dado forma a un jugador que al debutar joven se ha convertido en un líder precoz. Scalvini es más alto (1,94) que Inacio y Renan, no obstante, su envergadura no le convierte en un central ordinario, sino en lo contrario. Su portentosa zancada unido al toque de balón le permiten sacar la posesión jugada con facilidad. También puede desempeñarse como pivote en un esquema más arriesgado. El Manchester City tanteó su fichaje.
Todo esto teniendo en cuenta que en la cantera no hay ningún central que esté derribando la puerta del primer equipo. Mención especial a Rafa Marín, canterano del Madrid cedido en el Alavés hasta final de temporada que podría ser una de las opciones a tener en cuenta. Aunque en el club blanco no son partidarios de fichar un parche y la mitad del curso suele ser un momento complicado para encontrar un jugador de primer nivel que esté dispuesto a abandonar su club, el Real Madrid mira el mercado, al menos de reojo.