Nick Dunlap, el golfista amateur que deja alucinado a Jon Rahm: primero que gana un torneo PGA en 33 años
El golf es protagonista últimamente por el conflicto entre el PGA Tour, por un lado, y el LIV Golf, por otro. En plena negociación entre circuitos y el dilema para los jugadores, ahora mismo, de tener que optar por uno de los dos, un amateur ha logrado un hito capaz de traspasar fronteras. Al fin y al cabo, brillar en los campos no debería entender de afiliaciones, y la buena actuación deportiva que toca reseñar demuestra que así debería ser siempre. La ha protagonizado Nick Dunlap, un estadounidense de 20 años capaz de conseguir algo que no se veía desde hace tres décadas: el triunfo de un golfista no profesional en un torneo del PGA.
Ganó el Campeonato Amateur Júnior de Estados Unidos en 2021. También el Campeonato Amateur de Estados Unidos, que antes conquistaron leyendas como Tiger Woods, Arnold Palmer o Jack Nicklaus, el pasado 2023. Y este domingo, el American Express. Una competición en la que Dunlap ha hecho historia no sólo por estrenar en ella su palmarés golfístico de altos vuelos, sino por el hecho de que hacía 33 años que un amateur no se llevaba un evento del PGA Tour. Allá por 1991, en el Northern Telecom Open, pasó por última vez. Quien lo logró es totalmente reconocible en el mundillo: Phil Mickelson.
Te puede interesar: El otro Carlos español campeón del Dakar 2024
Da la casualidad de que el de San Diego, con seis grandes a sus espaldas, es una de las caras visibles del tour saudí tras haber defendido los colores del PGA toda la vida. El futuro dirá si Dunlap, de Huntsville (Alabama), acabará siguiendo los pasos de Mickelson y desembarcando en el LIV Golf. Lo cierto es que su concurso en La Quinta Country Club (California) ha despertado los elogios de su predecesor en el cuadro de honor del American Express. Precisamente, una de las estrellas que han optado por las suculentas condiciones económicas de Arabia: Jon Rahm.
El español, número tres del mundo, quiso mandar una felicitación pública a Dunlap después de que este firmase un -29 bajo par en el global para proclamarse campeón. “¡Qué logro tan asombroso de Nick Dunlap, juego estelar y maneras de salir adelante bajo presión para unirse al grupo muy selecto de jugadores que han ganado eventos del PGA Tour como amateurs! ¡Gran futuro por delante de este gran talento! Enhorabuena”, escribió el vigente ganador del Masters de Augusta a través de la red social X.
Te puede interesar: La precocidad de Alcaraz no tiene límites
Ser amateur deja a Dunlap sin premio millonario
El sudafricano Christiaan Bezuidenhout quedó segundo, con -28 bajo par. Se da la circunstancia de que la recompensa monetaria por llevarse el trofeo va a recaer no en el primer clasificado, sino en el subcampeón. ¿Por qué será Bezuidenhout el agraciado con 1,5 millones de dólares? Sencillamente, porque Dunlap es aficionado y todavía no puede recibir ningún dinero por sus victorias.
“No pude optar al cheque, pero fue un privilegio estar aquí y recibir el apoyo de tanto público. Poder demostrar que el golf amateur también es realmente bueno es algo único. Pero reconozco que aún estoy en shock. Nunca había visto tanta cámara y tanto periodista en un green”, comentó hace unas horas. Haberse impuesto en el American Express (motivo del mayor salto en el ranking mundial que se ha visto: del puesto 4.129 al 68) supone que podrá disputar cualquier cita del PGA Tour hasta 2026.
Se le espera en el Masters, después de ser de la partida en el US Open tanto en 2022 como en 2023. En ambos casos, no pasó el corte de mitad de prueba. Nick Dunlap se ha quedado al borde de ser el ganador más joven de todos los tiempos en el circuito estadounidense: su compatriota Jordan Spieth ganó el John Deere Classic de 2013 a los 19.
La lista de jugadores que ganaron en el PGA Tour sin ser profesionales es realmente pequeña, con el añadido de que todos quienes la componen son norteamericanos. La inauguró Cary Middlecoff en 1945, al ganar el North and South Open. Ese mismo año, Fred Haas triunfó en el Memphis Invitational y Frank Stranahan, en el Durham War Bond Tournament. En el 46, él mismo ganaría el Kansas City Invitational Victory Bond Golf Tournament y el Fort Worth Invitational, haciéndose con el Miami Open en 1948. Gene Littler entró en la ecuación en 1954, con el San Diego Open. En 1956, Doug Sanders mandó en el Canadian Open. Hasta 1985, con Scott Verplank en el Western Open, no hubo nuevas entradas en el listado. A continuación, llegarían a cuentagotas, con los casos de Mickelson y Dunlap.