Aston Martin da con la clave del mal rendimiento de Alonso: “Es muy sencillo”
Hace tiempo que la temporada de Aston Martin se ha convertido en una montaña rusa de emociones. Arrancaron la temporada con seis podios en ocho carreras, todos ellos con la firma de un Fernando Alonso, cuyos resultados cayeron una vez alcanzado el ecuador del año y una espiral de incertidumbre pasó a recorrer el box la escudería británica. Las carreras se sucedieron sin volver a ver al asturiano tocando metal y empapado en champán, hasta que volvieron de vacaciones. Aston Martin aprovechó el mes de parón para mejorar sus problemas de rendimiento y en Países Bajos volvieron al podio.
Sensaciones que no pudieron confirmarse en ni en Monza, ni Singapur ni Japón. Fernando Alonso acabó noveno en Italia, último en Marina Bay y octavo en Suzuka, evidenciando un problema de velocidad que preocupa al asturiano. “Nuestro DRS aún no es del todo efectivo, lo abrimos y el coche de delante se continúa yendo. Tenemos que mejorar en ese apartado”, explica. El DRS lleva dando guerra a Aston Martin lo largo de toda la temporada y dentro de dos semanas, en Qatar, volverá a ser un problema para la escudería británica. La naturaleza del trazado qatarí es rápida y fluida debido a varios virajes con un radio largo y las escasas horquillas o ángulos de 90 grados. Tan solo tiene una única zona de DRS situada en la recta principal de la pista, pero ocupa cerca de un kilómetro.
Te puede interesar: ¿Verstappen y Alonso compañeros de equipo? A Red Bull le gustaría: “Sería interesante”
“Tenemos que asumir errores”
Seis puntos en las últimas tres carreras evidencian unos problemas de rendimiento notables y ahora desde Aston Martin aseguran haber encontrado la causa del bajón de sus prestaciones. “Bueno, es puro desarrollo. Ves que algunos equipos realmente han logrado grandes avances y otros menos. Es bastante simple. No hemos hecho lo suficiente. Es probable que los demás hayan aumentado la brecha que hay entre nosotros y Red Bull, más que la brecha se haya hecho mayor por sí sola. Suzuka es una pista que también es muy especial, con su combinación de curvas y chicanes de alta velocidad; por lo que no hay que mirar solo un circuito, sino el transcurso de un par de carreras para juzgar dónde estamos realmente. Nos hubiera gustado ver más rendimiento, pero aún queda algo por llegar, así que confío en que podamos reducir un poco la diferencia”, comenta Mike Krack en declaraciones que publica RacingNews365.
Una explicación que sigue la línea intranquila marcada por Alonso de cara a la próxima temporada. “Tenemos que asumir errores y aceptar que tenemos que hacer mejoras en la forma en que nos desarrollamos Aquí todos tienen un nivel muy alto. Nuestro ritmo de desarrollo tiene que ser más rápido el año que viene. Sabemos que es una temporada de aprendizaje, pero para el próximo año tenemos que mejorar la manera en la que desarrollamos el coche”, sentenció el asturiano tras el GP de Japón.
Con un ojo puesto en el Aston Martin de 2024
Aún restan seis carreras en el calendario, pero, con el Mundial ya decidido, las escuderías tienen la mente puesta en la temporada que viene. El reglamento así lo exige. El límite de costes de la FIA y las restricciones de las pruebas aerodinámicas limitan las horas de pruebas en el túnel de viento y empuja a los equipos a comenzar temprano con el desarrollo de un nuevo monoplaza. “Obviamente, con el coche de 2024, hay que empezar bastante temprano. Todavía estamos tratando de desarrollar el coche este año, pero podemos transferir parte del aprendizaje del próximo coche al monoplaza de este año, ya que todavía quedan carreras por disputar”, explica, Tom McCullough, director de rendimiento de Aston Martin.
“En realidad, todavía tenemos bastantes piezas por llegar. Obviamente, muchas de las piezas tardan semanas y meses hasta que están disponibles para la pista. Los márgenes presupuestarios existen para que podamos transferir piezas del coche del año que viene al actual. Por lo tanto, todavía esperamos traer partes bastante avanzadas esta temporada”. La próxima parada será Qatar, un circuito con pocas curvas lentas donde la velocidad punta, debilidad de Aston Martin, es fundamental.