Se tomaron una selfie en el podio de los Juegos Olímpicos y podrían ser sancionados en su país tras padecer un “escrutinio ideológico”
Los atletas de Corea del Norte que participaron en los Juegos Olímpicos de París 2024 están enfrentando estrictas evaluaciones ideológicas en Pyongyang. Según publicó un informe del medio surcoreano Daily NK, estas revisiones por parte de las autoridades buscan detectar cualquier “contaminación” por influencias extranjeras, una preocupación recurrente para el régimen de Kim Jong-un.
Una fuente de alto rango en Pyongyang, quien habló bajo condición de anonimato, declaró al periódico que “los atletas y los miembros del Comité Olímpico de Corea del Norte fueron sometidos a una revisión ideológica desde su regreso el 15 de agosto”. En Corea del Norte, es una práctica común llevar a cabo tres rondas de evaluación para los deportistas luego de su regreso al territorio tras competir en el extranjero.
Estas rondas, que llevan el nombre de “escrutinios ideológicos”, incluyen evaluaciones del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea, el Ministerio de Cultura Física y Deportes, y una sesión de autocrítica entre los propios atletas.
La noticia salió a la luz debido a la selfie que se tomaron los jugadores de tenis de mesa Ri Jong Sik y Kim Kum Yong, que compitieron en la categoría de dobles mixtos y ganaron la medalla de plata en los Juegos Olímpicos. El informe revela que ambos fueron observados tomándose fotos con sus rivales surcoreanos y de China en el podio de París 2024 tras perder la final por 4-2.
“La escena de Ri y Kim tomando una selfie en el podio fue ampliamente considerada como un momento conmovedor por los medios internacionales”, señala Daily NK. La cuenta oficial de los Juegos publicó dicha imagen y la revista Time la incluyó como uno de los 12 mejores momentos de deportividad durante la cita olímpica en la capital de Francia. Sin embargo, este gesto fue catalogado como un grave error ideológico para las autoridades de Corea del Norte, que percibe la interacción con atletas surcoreanos como una amenaza.
El informe criticó a Kim Kum Yong por “sonreír” en la foto y a Ri Jong Sik por mostrarse amistoso con atletas de otros países. La fuente destacó que todavía está en evaluación “si las autoridades norcoreanas castigarán a Kim y Ri o los dejarán ir con una advertencia o autocrítica está por verse”. Además, el medio de Corea del Sur indicó que las evaluaciones ideológicas no solo afectan a los atletas, sino también a los miembros del Comité Olímpico que los acompañaron. Se espera que este intenso proceso dure aproximadamente un mes, según las informaciones obtenidas por Daily NK.
La primera de estas revisiones está gestionada por la oficina de deportes del Departamento de Propaganda y Agitación del Comité Central. “La evaluación comienza en el momento en que los atletas regresan a casa. Tienen que ‘limpiar’ su ideología lo antes posible”, explicó la fuente a Daily NK. Este procedimiento implica una inspección exhaustiva del comportamiento de los atletas en relación con los estándares ideológicos del partido.
Los funcionarios buscan cualquier infracción a las directrices del partido. Se informó que antes de los Juegos, a los atletas se les prohibió estrictamente tener contacto con otros deportistas extranjeros, incluidos los atletas de Corea del Sur. Cualquier violación de esta directiva puede resultar en serios castigos.
Más adelante, el Ministerio de Cultura Física y Deportes del Gabinete lleva a cabo una segunda evaluación que se centra en el desempeño deportivo de los atletas en comparación con eventos internacionales anteriores. Los resultados de estas evaluaciones son decisivos, ya que “los atletas que se desempeñen mal pueden enfrentar críticas e incluso castigos”, destacó Daily NK. En casos extremos, aquellos que no cumplen las expectativas pueden ser sentenciados a meses de trabajo sin remuneración.
La evaluación final involucra sesiones de crítica mutua y autocrítica. Durante estas sesiones, los atletas son incentivados a confesar cualquier comportamiento inapropiado y a criticar a otros compañeros por sus posibles desviaciones ideológicas. “Los atletas que contactan con atletas de otros países deben reconocer sus errores en las sesiones si desean evitar consecuencias políticas y legales en el futuro”, subrayó la fuente citada por Daily NK, en una historia que recorre el mundo del olimpismo.