Facundo Conte, íntimo: por qué volvió a jugar en Argentina después de la medalla olímpica y el amor “increíble” que recibe
El de hoy no será un día más en la gloriosa carrera que supo cimentar Facundo Conte. Este hombre de todavía 33 años, que las estadísticas marcan que mide 1,97 metros, nació y ya tenía una pelota de vóley en sus manos. A su lado estaba papá Hugo, una leyenda de este deporte que, en el final de su camino, llegó a compartir del rectángulo con su hijo en el club que recuperó a uno de ellos.
Esta noche se pondrá en marcha, a las 22, la gran final de la Liga Argentina de Voleibol. Ahí estará el Heredero con su número 7 en la espalda vestido con la camiseta de Ciudad Vóley. Enfrente estará el campeón reinante, UPCN, de San Juan, al mejor de cinco encuentros con los dos primeros a jugarse en Núñez. “Poder estar jugando acá y compartir todo esto es soñado. Después del resultado de Tokio, decíamos con los chicos que el resultado para el vóley argentino era muy importante y en base a eso era hora de tomar la decisión de que es lo mejor, qué mejor forma que devolverle al vóley argentino, a mi club, y a mí mismo, a mi Facu de 18 que poder jugar acá y nutrirme de todo ese cariño”, le contó Facu a Infobae.
¿Cómo espera el inicio de las finales de la liga? “Está siendo una experiencia increíble, vamos a jugar una final ahora importantísima, con mucha motivación. Con un estadio que se agotaron las entradas una semana antes del partido, algo que no había pasado nunca, y eso me pone muy feliz”, agregó el jugador que volvió a vivir en Argentina después de ser un trotamundos por diferentes países de Europa y Brasil.
En un diálogo íntimo, Conte explicó en qué se basó para retornar y cómo el modo tour que hizo con su equipo por todo el país, gracias al formato de juego de la competencia recorrió diferentes provincias y llevó el deporte a la gente, le sirvió para darse cuenta del enorme cariño que tienen por él los amantes del vóley.
– ¿Por qué decidiste volver después de tanto tiempo fuera del país?
– La verdad es que fue algo hermoso. Fue la decisión más fácil que tomé en mi carrera porque realmente lo deseaba y poder estar acá después de 15 años es un conjunto de muchísimas emociones, sensaciones y también recuerdos desde un lugar diferente. Son nuevas vivencias en un lugar conocido, pero en el que a veces también me siento extraño. Y hoy poder estar en mi casa, con mi gente, hablando español, que parece poco pero es un montón, la verdad ha sido hermoso, muy fácil, y la verdad que me pone muy feliz de estar viviendo fácilmente en mi día a día. Pasándola bien en el lugar en donde vivo, en mi ciudad, sacándome las ganas de estar acá. Siempre había estado un mes, 15 días al año. Pero al estar tan poco tiempo, uno quiere disfrutar, pero bueno, está la vorágine de un montón de emociones y cosas. Y hoy, poder hacerlo con más tranquilidad, hacerlo, además, con la nueva situación y realidad que Tokio me ha dado la posibilidad de disfrutar y recibir muchísimo cariño increíble. Toda la temporada fue espectacular, viajando por todo el país. El sistema de juego me ha permitido estar en diferentes puntos cardinales y así poder disfrutar de todo el cariño. Fue hermoso.
– Después de la medalla en los Juegos Olímpicos te convertiste en una atracción para el público. Imagino que la recepción de cariño fue como nunca antes en tu carrera.
– Ha sido increíble. Aprendí a lo nuevo. Aprendí, fue un proceso poder jugar acá en Argentina. Fuimos locales con Ciudad en la mayoría de las provincias del país debido a ese cariño de la gente que venía a verme, a vernos, y eso ha sido muy mágico y gratificante. Poder entrar a la cancha antes del partido, recibir aplausos, cariño, gritos. Ha sido increíble. Dentro y fuera de la cancha también, no. La experiencia en Tokio fue increíble, desde lo personal, lo deportivo y la repercusión que eso tuvo en el vóley y en mi imagen personal. Estoy muy agradecido de estar viviendo esto. Parte de la decisión era poder disfrutar. Siempre estuve acostumbrado a jugar en otros países y recibir el cariño, pero motivando a chicos de otras latitudes. Y hoy poder estar jugando acá y compartir todo eso es soñado. Además, después del resultado de Tokio, decíamos con los chicos que el resultado para el vóley argentino era muy importante y en base a eso era hora de tomar la decisión de que es lo mejor, qué mejor forma que devolverle al vóley argentino, a mi club, y a mí mismo, a mi Facu de 18 que poder jugar acá y nutrirme de todo ese cariño. Está siendo una experiencia increíble, vamos a jugar una final ahora importantísima, con mucha motivación. Con un estadio que se agotaron las entradas una semana antes del partido, algo que no había pasado nunca, y eso me pone muy feliz.
– Después de tanto tiempo, más allá que seguías lo que pasaba con nuestro vóley, ustedes (el plantel olímpico) hicieron foco después del podio en la valoración que tenía que tener esa conquista más allá del metal. ¿Con qué liga te encontraste a nivel competitivo y en la organización y si tenés la necesidad de ocuparte en el desarrollo más allá de tu rol como jugador?
– Es un tema importante. Tokio y la repercusión que tuvo, de a poco me puso más en contacto y también la necesidad de querer aportar más. No sólo desde la cancha, como jugador, sino desde otros ámbitos. La Liga ha sufrido mucho en los últimos años por la situación del COVID-19 y lo difícil que fue jugar. Creo que la ACLAV (Asociación de Clubes) ha sido muy buena para poder crear y gestionar un sistema de juego acorde a la situación presente del país. Además, la posibilidad de ser tan federal y jugar en todas las distintas provincias del país. Eso es importantísimo. Nosotros como jugadores de la Selección en los últimos años hemos expuesto la necesidad y las ganas de que nuestro deporte sea mejor administrado, mejor gestionado por las dirigencias para poder, justamente, utilizar ese triunfo. Que no sea aislado y tener más apoyo para poder crecer y que los chicos se acerquen al deporte. Hay cosas que antes de los Juegos Olímpicos por ahí ni me planteaba y hoy tengo esa “necesidad” de poder aportar lo más posible y poder generar un cambio. Parte de estar acá también es por eso y poder darle mayor visibilidad al torneo. Hay ligas que son más competitivas, pero hoy hay muchos jugadores argentinos jugando afuera y, si bien el nivel deportivo de la liga ha caído un poco, creo que también es un momento importante porque todos esos jugadores que se han ido de Argentina generaron un lugar para muchísimos chicos jóvenes que están jugando. Hoy el promedio de edad de la liga es muy bajo, justamente por eso, entonces creo que a lo largo del tiempo eso dará sus frutos. Porque, la posibilidad de que chicos de 18, 19, 20 y 21 años, que estén jugando de titulares una liga entera, es muy bueno. Genera expectativa en los jóvenes y muchísimo crecimiento a futuro para el vóley argentino. Que en categorías inferiores siempre hemos estado entre los primeros puestos del mundo. Eso ayuda hoy a que tenga más espacio y protagonismo y así poder crecer.
– ¿Qué esperas de las finales contra UPCN, un equipo que viene de ser potencia desde hace años en la liga y a nivel internacional?
– Las expectativas son altas. Juego para divertirme, pero aprendí a jugar para ganar. Entonces, está claro que el objetivo y la expectativa es ganar. Es propia, es de equipo. No con la presión de tener que hacerlo, sino con las ganas y el deseo de lograrlo. Justamente, UPCN es un club que ha ganado mucho y ellos defienden el título. Nosotros podemos esperar y darlo todo para poder escribir una historia diferente y ojalá que así sea
– ¿Hubo alguna apuesta con Cristian Poglajen, que juega en UPCN y fue parte del bronce en los JJOO?
– No hay. La verdad que no. Es por el honor. Es una cuestión… Estoy muy concentrado en lo que nosotros tenemos que hacer y cómo tenemos que jugar. Adentro de la cancha no tengo amigos, jaja.
Las finales de la Liga Argentina de Voleibol entre Ciudad Vóley y UPCN
La definición entre los equipos será al mejor de cinco partidos. Este viernes 14 se jugará el partido 1 en Núñez desde las 22. El domingo (13.45) será el segundo encuentro, también en el gimnasio de Ciudad. La serie se mudará a San Juan para el partido 3, el próximo viernes 21 desde las 22. En el caso de ser necesario, el juego 4 se disputará el domingo 23 (13.10) y sí el mano a mano entre los mejores de la fase regular se va a un quinto encuentro, el mismo se llevará a cabo en Buenos Aires, el jueves 27 a las 21.10. La televisación estará a cargo, como en toda la temporada, de TyC Sports.
En el caso del equipo de Facu Conte, fueron los mejores de la etapa inicial con récord de 22 victorias y sólo una derrota. En los playoffs, Ciudad eliminó a Once Unidos de Mar del Plata en los cuartos de final. Ya en semifinales, dejó en el camino a Policial de Formosa y ahora buscará su primer título en la máxima categoría del vóleibol argentino luego de perder en las últimas dos finales ante el que será nuevamente su rival en las finales. El equipo que tiene al Heredero como máxima estrella, es dirigido por Hernán Ferraro, que viene de ser el DT de Las Panteras, la selección femenina de vóley, además de tener una gran trayectoria en la disciplina a nivel clubes.
Del otro lado estarán los sanjuaninos. UPCN es el máximo ganador de la historia con nueve títulos y lleva 12 presencias en finales. Su entrenador es el histórico Fabián Armoa y entre el plantel se destaca Cristian Poglajen, otro de los que se subieron al podio olímpico hace dos años en la capital de Japón en la cita olímpica. Con marca de 19-3 en la temporada, el conjunto de San Juan dejó en el camino a River Plate (cuartos de final) y a Monteros de Tucumán (semifinales) para volver a ser finalista de la liga nacional de vóley.
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